domingo, 22 de abril de 2018

DÍA DE ESTRENO Y JAMACUCO

Después de seis años y medio vuelvo a cambiar de Centro de trabajo. Soy una persona que no puede estar trabajando mucho tiempo en el mismo sitio. Transcurridos unos años me ahogo si veo siempre a los mismos pacientes que además se hacen absolutamente dependientes de ti y acaban por consultarte hasta lo que no son problemas de salud:
_ ¿ Voy de viaje o no voy?
_ ¿ Me separo o no me separo?
_ ¿ Como tomate o no como?
_ ¿ el Madrid o el Barca?

Acabo de recalar en el mismísimo centro geográfico de la capital donde hay una población ancianísima. El primer día todas las historias clínicas eran iguales: hipertensión, diabetes, hiperlipemia, cardiopatía isquémica, insuficiencia cardiaca, fibrilacion auricular anticoagulada. Recibí una dosis de realidad de lo que va a ser el futuro inmediato en este país en cuanto a asistencia sanitaria se refiere: ANCIANOS CON PLURIPATOLOGÍA.

La consulta transcurrió sin incidencias y me dije: " Por fin en este Centro hay menos urgencias" (el hospital está al lado y eso contribuye). Cuando ya había terminado de atender a todos los pacientes aparece en la puerta Rosa, una señora de 82 años con cara de sonámbula diciendo que necesitaba recetas y había perdido la tarjeta sanitaria.
_Tranquila, le digo, las hacemos en un momento buscando su historia clínica. Veo que en la carpeta que lleva tiene escrito en un folio con letras grandes:" recoger en el mostrador la nueva tarjeta". Me doy cuenta de que Rosa tiene un inicio de demencia senil y le apuntan todo en su carpeta.
   Cuando ya se marchaba del Centro con su nueva tarjeta y sus recetas ¡zas! le dio un jamacuco y entró otra vez en la consulta, de urgencia, blanca como la pared y sudorosa como un pollo remojado. Después de la exploración y diversas pruebas todo se redujo a una bajada de tensión que remontó con la chispa de la vida (una coca-cola). Llamamos a sus familiares para que vinieran a buscarla y le ajustamos el tratamiento.

¡Hala! vaya usted con Dios a su casa que yo me voy a la mía.